martes, 10 de mayo de 2011

Creación de Sistemas Operativos invitados con virt-manager


En un post pasado sobre la instalación de KVM en Ubuntu 10.10, mencioné como opcional la instalación del paquete virt-manager, un manejador gráfico de particiones virtuales. En esta entrada voy a hacer un ejemplo paso a paso de la creación de una máquina virtual con Ubuntu 10.10 utilizando el Virtual Manager.

Como siempre, comienzo diciendo que no es la única herramienta para este propósito, simplemente la que estoy utilizando, por parecerme sencilla. En la documentación de KVM mencionan además del Virtual Manager, 2 opciones: virt-install, un script en Python desarrollado por Red Hat y ubuntu-vm-builder, desarrollado por Canonical.

Comenzamos descargando la imagen del sistema operativo que queremos instalar en la partición virtual. Yo instalé Ubuntu 10.10.

Abrimos Virtual Manager. La interfaz es realmente simple:

Aparece la lista de máquinas virtuales, su estado (Corriendo, Apagada) y el uso de CPU de cada una (En la lista aparece una máquina virtual, serv1 que había creado anteriormente).

Al hacer clic en el ícono de nueva conexión se levantará un Wizard para la creación de la MV.


Colocamos un nombre a nuestra máquina (las mías serán servidores, por lo que las he llamado serv1 y serv2) y escogemos Local install media (ISO image or CDROM).


Seleccionamos la ruta donde se encuentra la imagen y damos detalles del SO que instalaremos.



Seleccionamos cuanta RAM y cuantos procesadores (en caso de que la máquina anfitriona sea multiprocesador) utilizará nuestro SO. A gusto de cada quien, yo como tengo poca RAM, le coloqué 512MB.


Decimos cuanto espacio en disco podrá usar nuestro SO y si se asignará todo el disco al momento de la creación (Allocate entire disk now), lo cual hará el proceso de creación de la MV un poco más lento, pero es más seguro y por tanto lo recomendado.

En el último paso, se mostrará un resumen de las opciones seleccionadas y al presionar finalizar, se levantará una ventana, en donde veremos como se comienza a cargar el disco de instalación de Ubuntu (en mi caso), tal como si estuvieramos trabajando directamente sobre un PC, como hacemos regularmente. Lo que queda es instalar el SO.

Una vez instalado el SO, la máquina virtual quedará corriendo. Desde el menú del Virtual Manager, podremos apagarla, encenderla, etc.


No hay comentarios: